miércoles, 13 de junio de 2012

Cuando parecido sí es lo mismo que igual: Los Capuchinos.


El año pasado posteé un análisis de algunas especies de aves de Paraguay que eran parecidas entre sí, pero que no eran lo mismo. Esta vez les presento un caso distinto, un caso en el que los ornitólogos a nivel Sudamérica (no sólo los de Paraguay) han dicho que eran especies distintas y terminaron siendo la misma especie (más bien una variante biogeo. El Caso de los “Capuchinos de Paraguay”.
No son unos monjes con togas y rosarios, ni se sirven en algún bar de lectura con medialunas, son un conjunto de especies del género Sporophila,  que divergió hace unos cuantos miles de años, uno de los géneros más recientes de aves conocidas en Sur América. En el continente conocemos a este grupo por 11 especies en el que se caracterizan por tener patrones de coloración canela en el plumaje reproductivo de los machos, las hembras… son un dolor de cabeza, pues son todas iguales, por lo que en el campo, sólo se identifica a la especie por los machos.
Son “pajaritos” de 9 cm casi imperceptibles a los ojos de cualquier transeúnte, pero estoy segura de que muchos ornitólogos saltarían de la vía si viera o escucharan el canto de estos bichos. ¿Por qué darle importancia a pajaritos tan pequeños y las hembras son una especie de clones entre especies?
Muchas de estas especies son bastante raras en el continente, algunas, se vieron contadas veces en el país (a lo largo de su historia), teniendo un limitado rango geográfico con una significativa declinación de su población debido a la pérdida de hábitat y la captura para mascotas (tienen un lindo canto) muchas de estas enanas especies están en peligro crítico de extinción.
Pero, bueno, ese no era el punto de este posteo, el punto era… ¿qué tal que dos especies  relativamente distintas resultan ser una misma? El criterio de que dos especies sean realmente especies distintas es que estén aisladas reproductivamente y en el caso de que puedan reproducirse den un vástago híbrido infértil, aun así es medio complicado ver  cuando se reproducen, análisis ex situ como pruebas de canto, coloración y hábitat, con esto un ornitólogo argentino, Ignacio Areta, estudió a dos especies curiosamente parecidas y distintas a la vez.  
Sporophila zelichi y Sporophila palustris desde el inicio fueron especie altamente polémicas, por su extremo parecido entre ambas. Éste investigador puso a prueba varias hipótesis sobre su origen, diciendo que podría ser un híbrido de dos capuchinos, o tal vez una variante regional de Sporophila palustris, o  una variante regional de Sporophila cinnamomea (un capuchino más canela).


Los resultados salieron que S. zelichi y S. palustris tienen notas idénticas y muy características cosa que no se da en otras especies de capuchinos, como también las preferencias de hábitat son las mismas entre sí, ambas especies responden a cantos de reproducción independiente a su especie.  Por lo que se concluye, hasta ahora, que ambas especies sólo son la misma con una variación biogeografica de color.

Hasta los genios se equivocan no?

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